La justicia social y el progreso para todos no son posibles sin una educación que disminuya las brechas que producen las desigualdades socioeconómicas. Nuestra meta es contribuir a la construcción de ciudadanía, a partir de una justa distribución del conocimiento. Esto supone garantizar no sólo el acceso a la escuela, sino la permanencia y egreso de todos aquellos que la inician. Implica también posibilitar que todos los estudiantes se apropien y adquieran las herramientas y capacidades necesarias para comunicarse, trabajar y participar en una realidad social cada vez más compleja y mediatizada.

Por ello, a través de una ley aprobada en 2016, las salas de tres años son obligatorias para el Estado y opcionales para las familias. Desde esta perspectiva, inclusión y calidad educativas son dos conceptos inseparables. Se trata de expandir la cobertura –para que todos puedan ir a la escuela–; garantizar una educación temprana gratuita y de calidad a niños que, si no fuera a través de la oferta estatal, no podrían acceder a ella –para superar las diferencias que se producen en el ingreso a la primaria–; renovar y adecuar las propuestas pedagógicas –para propiciar la permanencia y el progreso de los estudiantes en el sistema– y mejorar los resultados de aprendizaje (para garantizar su egreso).

La educación en los primeros años de vida es garantía de desarrollos plenos, presentes y futuros, por eso en Córdobageneramos las condiciones que permiten a los niños la permanencia en los trayectos escolares obligatorios. Nuestra Provincia adoptó la decisión política de fijar por ley (de Educación Provincial 9.870), en el 2010, la obligatoriedad de la sala de cuatro años en los jardines de infantes y la universalización de la sala de tres años en contextos vulnerables.

La ley de Educación Nacional 26.206 establece que las escuelas primarias serán de jornada extendida o completa y fija como meta llegar al 30% de los establecimientos educativos en 2015.En Córdoba, de manera progresiva y a través de la construcción de nuevas aulas y salones de usos múltiples, el 100% de las escuelas primarias urbanas y de las rurales con más de 60 alumnos cuentan con dos horas más de clases, en el segundo ciclo (4° a 6° grado) y en el primer ciclo (1° a 3°) en aquellas situadas en contextos sociovulnerables.

La obligatoriedad de la educación secundaria nos desafía a pensar acciones que garanticen las condiciones que posibiliten a los jóvenes ingresar y finalizar sus estudios adquiriendo conocimientos y habilidades indispensables.

La estructura curricular de los ciclos básico y orientado se modificó: se redujo el número de materias, sin perder contenido y aumentando las horas de clase en las asignaturas de Ciencias. Se incorporó la figura del coordinador de curso, para generar estrategias de acompañamiento a los estudiantes y articulación pedagógica entre los docentes y los directivos.

Repensando el formato escolar en Córdoba, pusimos en funcionamiento 6Escuelas Experimentales PRO-A enSan Francisco, Córdoba Capital, Laboulaye, Porteña, Villa Dolores y San Pedro. Con un diseño curricular por ciclos (y no por años) brinda, a través de las nuevas tecnologías, el título de Bachiller en Diseño de Software.

Desde mediados de 2010, se implementa el Programa 14/17, de Inclusión y Terminalidad de la Educación Secundaria y Formación Laboral, para que jóvenes que abandonaron sus estudios o directamente no los iniciaron pueden finalizar el secundario a través de un servicio educativo que, en razón de su diseño más flexible, permite a cada estudiante construir su propio trayecto formativo.

En 2015, se recibió la primera camada de estudiantes con el nuevo plan de estudio de las 207 escuelas técnicas estatales y las 49 privadas, en las 19 especialidades existentes (que están ubicadas de tal manera, que los jóvenes cordobeses pueden asistir a la especialidad técnica que deseen, sin alejarse más de 30 km de su residencia).

En Córdoba, el Estado tiene un rol central en la capacitación gratuita de los docentes: más de la mitad del plantel docente realiza cursos de actualización profesional de manera gratuita, de manera presencial o virtual, organizados por el Ministerio. En 2016, se creó el Instituto Superior de Estudios Pedagógicos (ISEP), a fin de fortalecer la formación docente en todos los niveles y las modalidades del sistema educativo..

Se pusieron en marcha mecanismos para que las escuelas reflexionen y evalúen su propia acción educadora, a través de un instrumento de autoevaluación institucional elaborado por el Consejo Provincial de Políticas Educativas (conformado por el Gobierno, las universidades, las fuerzas políticas de la Legislatura, los gremios docentes y otros actores educativos).