• En el Mes de la Mujer, conocemos historias de cordobesas que mediante terapias de grupos brindadas por la Secretaría de Adicciones obtienen distintas herramientas para abordar problemas asociados al consumo de sustancias.
• El proceso de recuperación que llevan adelante busca vencer prejuicios y estigmas aun presentes en la sociedad.

La Secretaría de Prevención y Asistencia de las Adicciones, dependiente del Ministerio de Salud, lleva adelante espacios de terapia grupal destinados específicamente al trabajo con mujeres.

Estos grupos operativos guiados por profesionales de la salud trabajan distintas herramientas y estrategias destinadas a abordar problemas asociados al consumo de sustancias.

Tal es el caso de Lucía, una cordobesa que hace 9 meses llegó al grupo buscando contención y herramientas que le ayuden a superar obstáculos y así poder mejorar su vida.

La joven participa en terapias grupales e individuales, tiene acompañamiento profesional y se siente muy satisfecha con su progreso.

“Yo planteé muchas veces qué tipo de vida quiero tener y acá me enseñaron y me ayudaron y contuvieron en ese sentido. A veces una quiere cambiar y no sabe cómo hacerlo y acá me brindaron las herramientas para que mi vida sea diferente”, expresó Lucía.

Las pacientes de diversas edades comparten vivencias, realizan actividades de reflexión y diálogo y aprenden herramientas para llevar adelante su proceso de recuperación.

Otro valioso testimonio es el de Sofía, quien encontró apoyo y empatía en el grupo de mujeres.
La joven destacó la importancia de buscar ayuda, reconocer y manejar las emociones, y trabajar en la salud mental.

“Desde que estoy acá puedo ver que en mi casa hay otro aroma, otro ambiente, mucho más de hogar, más tranquilo y en esta etapa tienen mucho que ver las chicas del grupo”, enfatizó Sofí.

El prejuicio de los consumos en las mujeres

En el Mes de la Mujer, las pacientes que participan de este grupo reflexionaron sobre los estigmas que aún existen en la sociedad sobre las mujeres que presentan problemas de consumo.

“Nosotras siempre nos tenemos que ver fuertes, como que no tenemos tiempo para sufrir una adicción o un trastorno como si lo puede tener un hombre. Nosotras tenemos que ser el pilar de una casa, debemos ser buenas madres y buenas esposas, no importa nuestra salud mental. Aun lidiamos con esos prejuicios”, analizó Sofía.

Según sus relatos, para las mujeres buscar ayuda puede ser difícil, ya que nadie quiere mostrarse vulnerable.

Para ellas es importante reflexionar sobre cómo uno se siente y qué quiere para su vida, más allá de los prejuicios existentes. Este espacio ayuda a limpiar el campo de esos conceptos y acercarse a lo que es valioso para uno.

“Con las chicas compartimos las mismas emociones y las mismas luchas. No importa qué dimensión o qué tamaño tenga la adicción de cada una, todas sentimos y pasamos por lo mismo”, agregó Ada.

En cuanto al rol de la mujer en la sociedad, Ada detalló que en su familia, hasta el día de hoy, se minimiza la problemática de los consumos.

“Es muy difícil escuchar a una mujer que diga con tanta claridad que tiene problemas de consumo y su entorno lo entienda por completo. A mí me ayudó mucho el grupo, donde pude ver que no soy la única, hay un montón de casos como el mío y no estoy sola. Eso está bueno”, concluyó Ada.

Las pacientes del taller grupal coincidieron que en la actualidad siguen luchando para que aquellas compañeras que están en proceso de recuperación puedan conseguir un trabajo formal, un tema que todavía se les dificulta.

Para la Psicóloga Micaela Carante, quien está a cargo del grupo de mujeres, este espacio ofrece entrenamiento en habilidades, fortalecimiento personal y desarrollo de autonomía.

La profesional, sostiene que cuando una mujer dice que tiene problemas de consumo o una adicción, tiene una doble condena.

“Las adicciones no responden a ciertos mandatos sociales. En este espacio podemos derrumbar esos mitos. Nuestras mujeres tienen la misma posibilidad que los hombres de poder realizar un proceso de recuperación como se merecen, sin juicios morales, con profesionales idóneos y con sus pares”, aseveró.

“Este es un lugar seguro y de contención para las mujeres que buscan ayuda”, cerró la profesional.

Quienes necesiten ayuda, deberán sacar un turno de primer contacto por WhatsApp al 3513810583 o ingresando a la página web https://www.secretariadeadicciones.com/cas-cordoba.

El programa funciona de manera gratuita en el Centro Asistencial Córdoba, ubicado en el Hospital San Roque viejo.

Datos de la Secretaría de Prevención y Adicciones
Durante el 2023 más de 7 mil personas pasaron por el Centro Asistencial Córdoba para iniciar tratamiento.

La secretaría brindó más de 54.300 prestaciones: Primer Contacto, Terapia Grupal, Terapia Familiar, Terapia Individual, Cesación Tabáquica, Psiquiatría.