Desde la Dirección de Jurisdicción de Maternidad e Infancia, según la evidencia y la práctica, se propone abandonar la noción patologizada de las adolescencias, asociada a lo disfuncional y lo problemático, dejando de intervenir en torno a evitar o disminuir el riesgo, o que de que se conviertan en víctimas y/o victimarios de situaciones que comprometan la salud, la propia vida, la de los demás y la seguridad individual y social.
La propuesta es considerar a adolescentes y jóvenes como legítimos sujetos de derecho, como punto de partida y una posición irreductible que exige repensar su salud en contextos respetuosos de sus necesidades y posibilidades.
