Please ensure Javascript is enabled for purposes of website accessibility
Generic selectors
Exact matches only
Search in title
Search in content
Post Type Selectors
Generic selectors
Exact matches only
Search in title
Search in content
Post Type Selectors
Generic selectors
Exact matches only
Search in title
Search in content
Post Type Selectors
PROGRAMA ENTORNO LABORAL SALUDABLE

Ejercicios de respiración

Ejercicio para liberar tensiones

Diariamente, nos exponemos a diferentes situaciones que generan tensiones que vamos cargando en diferentes partes de nuestro cuerpo y que con el paso del tiempo se manifiestan en dolencias.

A veces podemos sentir un nudo en la garganta o en la boca del estómago, una sensación de peso sobre los hombros o en la zona cervical, alguna molestia en la zona lumbar o simplemente una percepción inquietante en las manos.

Este ejercicio nos sirve para poder liberar esas tensiones acumuladas y experimentar calma, alivio y tranquilidad nuevamente.

 
PREPARACIÓN:
  1. Buscá un lugar tranquilo y apartado donde sientas comodidad para realizar el ejercicio.
  2. Adoptá la posición de pie con una separación ligeramente mayor al ancho de hombros y dejá tus brazos colgando a los costados de tu cuerpo con la mirada al frente.

EJERCICIO: 

  1. Cerrá los ojos y comenzá a respirar pausadamente por nariz. Si es necesario, podés hacer 2 a 3 inhalaciones profundas que te ayudarán a centrarte.
  2. Identificá en cuáles partes de tu cuerpo sentís tensión. Hacé un recorrido de arriba hacia abajo y fijate dónde percibís una sensación de molestia.
  3. Una vez que la hayas identificado, abrí los ojos y fijá tu mirada en un punto delante tuyo (también podés dejar tus ojos cerrados si te resulta mejor).
  4. Llevá los brazos extendidos con las palmas abiertas sobre la cabeza, manteniendo la separación de ancho de hombros. Inhalá profundo por nariz llenando tus pulmones.
  5. Retené el aire un momento, cerrando y ajustando los puños.
  6. Exhalá enérgicamente por boca dejando que el aire provoque un sonido al salir, a la vez que bajás tus codos como si dieras un golpe en alguna superficie (procurá no tener ningún objeto cerca con el que puedas lastimarte).
  7. Repetí este ejercicio hasta que sientas alivio y esa sensación de tensión se haya ido o haya comenzado a disminuir.
RECORDÁ: 
  • Para que el ejercicio cumpla su objetivo repetí las respiraciones hasta que sientas alivio, calma o tranquilidad y esa tensión que percibías se haya ido.
  • Detené el ejercicio si en algún momento sentís mareo e intentá normalizar la respiración.
  • ¡Disfrutá!

Este tipo de ejercicios, junto a otros de movilidad, se realizan como pausas activas en los edificios adheridos al programa Entorno Laboral Saludable. ¡Consultá en tu repartición si se llevan a cabo allí y qué días!

Artículos relacionados